01/01/2023 Preparativos

Empieza el año con un día soleado. Este día actualizamos y remodelamos el blog con los cambios que hemos introducido en la planificación del proyecto y para incluir el reto. Este reto "EL PATRIMONIO MÁS QUERIDO"  será el elemento vertebrador del proyecto y tiene como objetivo reconocer y fomentar la participación de las poblaciones locales en la defensa y la difusión de su patrimonio cultural.

Es una acción concreta, sencilla, lúdica que concreta la estrategia " INTEGRATED APPROACH TO CULTURAL HERITAGE" de la Unión Europea.

La narración escrita de este reto, con anécdotas, comentarios, etc. será publicada regularmente en el Diario de Almería en forma de crónica, y comunicada puntualmente a los medios locales a lo largo de la Ruta.

 


 

 

etapa 1: Murcia

 

Patrimonio Inmaterial de la Humanidad: Consejo de Hombre Buenos

 

 

 

Salgo de Almería sobre las 11h, domingo 15 de enero. Estoy aún en fase de aprendizaje, en lo que a la conducción de una autocaravana se refiere, por lo que un poco de nervios, tengo que reconocer que sí que hay. El vehículo es una Fiat Joint 150 de aproximadamente 6,5 metros - del 2007, que dirían los americanos. El viaje: tranquilo. Una pequeña parada para comprobar que las bicis que llevo siguen bien amarradas. Y poco más que reseñar...excepto un pequeño hecho insólito para mi, ya que es la primera vez en mi vida que lo presencio: circulando por la autovía dirección Murcia, un pájaro con vuelo rasante golpea contra el parabrisas. Quien sabe: tal vez tuviera problemas de visión, o iba distraído, o lo que sea. En todo caso, espero que, al conducir yo relativamente despacio (90 km/h), haya salido indemne.

 

Al llegar a Murcia, voy directo al aparcamiento municipal. “Aparcamiento disuasorio” lo llaman. Resulta que está abarrotado. Un ejército de aparcacoches intenta guiar a los coches que entran y salen. Al principio indico que “no, gracias”, pero en cuanto rozo con un vehículo aparcado y me encuentro de repente atascado en medio del mar de coches, cambio de idea. 1 Euro. Bien empleado.

 

Y llegamos al patrimonio en sí. El consejo de Hombre Buenos. Una institución tradicional para resolver conflictos en torno al uso del agua en la Huerta de Murcia cuyos orígenes se remontan, al parecer, al siglo XIII, aunque la primera mención acreditada, en el siglo XIX, aparece en las Ordenanzas de la Huerta de Murcia de 1889. Reconocido como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco en 2009.

 

Muy poco material en Internet y nada o casi nada en documentos de archivo. En la Oficina de Turismo me reomiendan dirigirme a la sede de la Junta de Hacendados que es quien lleva la gestión de ese organismo. Me dicen allí que el Consejo se reúne cada jueves. Muy bien, pero eso no me ayuda. Les pregunto si tienen información histórica, fotos, documentos... Sí, pero aún no lo tienen ordenado ni publicado, aunque el secretario amablemente me pide mi correo electrónico prometiéndome enviar lo que encuentre. Al final me pasa un documento powerpoint que lamentablemente no me sirve. De ahí al Archivo municipal donde doy con algunas fotos en blanco y negro sobre el río Segura, pero sobre el Consejo, nada. Me pregunto en qué se basó la Unesco para reconocerle esa distinción...Se está complicando la cosa. Y eso que estamos en la primera etapa.

 

Al final, un poco a la desesperada, con lo poco que encontré en archivo y lo que conseguí grabar con mi cámara y mi dron, consigo montar un video que publico en Instagram (aprovecho para invitar a los lectores del Diario a seguirnos: @rutadelpatrimonio). Etapa 1 resuelta, y adelante para la siguiente: el Museo Escolar de Puçol, cerca de Elche.

 

Al día siguiente, al salir de murcia...vuelvo a rozar con otro coche al salir del aparcamiento. Confío en que sea la última vez. Cerca del Museo de Puçol, hay un espacio protegido que no conozco: el parque natural del Fondo. Marco en Google Maps la ubicación del Centro de Interpretación del parque y allá voy. Apenas 50 minutos de ruta y cuando llego, me llevo una alegría: espacio amplio para estacionar, unas pocas autocaravanas con matrícula NL, UK, D y F y sobre todo...un espacio natural abierto, sin ruidos, con charcas, marismas, juncos y pájaros que pasan el invierno. ¡Por fin! ¡A descansar!

 


 

 

etapa 2: Puçol - Elche

 

Patrimonio Inmaterial de la Humanidad: Museo escolar de Puçol

 

 

 

El parque natural del Fondo se encuentra a unos 20 kilometros de Elche. Las referencias de otros caravaneros respectos al área de estacionamiento eran ambivalentes: muchos baches decía uno, una área muy tranquila decían otros. Llegué pues con algunas dudas, pero de inmediato se despejaron. Para bien. Ni un ruido y solo unas pocas autocaravanas estacionadas. Después del estrés vivido en el aparcamiento de Murcia, este se me antojaba casi como un paraíso. Aparqué y salí en seguida a dar una vuelta por los alrededores. Mucho viento, eso sí, pero en Almería estamos más que acostumbrados. No recuerdo los nombres de las aves que residían en el lugar – sí que eran muchas diferentes - pero si recuerdo que había varias especies amenazadas de extinción y en particular la anguila europea, pues al parecer ahí se encontraban los últimos ejemplares vivos. Investigando un poco, me encuentro con que la cadena de televisión France24 la menciona en un reportaje propio. Así que ahí va mi contribución al tema.

 

Lo que sí eché en falta es una cafetería. Necesitaba tomarme algo caliente. El Centro de Interpretación estaba cerrado por la tarde por lo que fui a la población cercana de San Felipe Neri, donde tuvo en el pasado su base un cuartel de la Legión, y distante de un par de kilometros. Me hubiera gustado darme un paseo en bici, pero el viento era demasiado fuerte. Al llegar, me encuentro con que los dos bares de la localidad también cerraban por las tardes. ¡Vaya por Dios! Vuelta a mi casa móvil y a descansar y disfrutar de la naturaleza.

 

Al día siguiente, miercoles, voy al Museo Escolar de Puçol, reconocido Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2009, y objeto de mi estancia en el lugar. Se denomina museo escolar porque está estrechamente vinculado con el CEIP de Puçol, el cual lleva cuatro décadas trabajando por la conservación y recuperación de las costumbres y tradiciones locales, tanto del campo como de la ciudad. No es muy grande, pero desde luego es “muy apañado”. Todo muy claro y ordenado, y muy pedagógico. Se nota la mano y el trabajo de los docentes. Me acojen muy bien y me dejan filmar todo lo que quiera, salvo - por supuesto – las aulas, ya que, cosa notable, el Museo y el CEIP son casi una y misma cosa y paseando por las exposiciones se pueden ver y oír a los niños – y las niñas – trabajando en las aulas. ¡Me ha encantado este Museo!

 

Acabo de grabar, de montar y subir la Publicación a Instagram y después de dudarlo un poco, decido pernoctar una noche más en el Parque del Fondo. Quiero disfrutar un poco más de la naturaleza antes de poner rumbo a Elche. Viajando en autocaravana, las ciudades no son lugares especialmente acogedores.

 

 

etapa 3 Elche

 

Patrimonio Inmaterial de la Humanidad: Misteri de Elche

 

 

Llego a Elche a las 9h y aparco un poco en las afueras, en la zona de la Plaza Castilla. Así me obligaré a usar la bici para ir al centro. Llevo dos el parte de atrás. Llegar en autocaravana a algún lugar es como como llegar en tren o en bus: una vez situado, ya no se toca hasta el momento de la partida. No es como el coche, que se utiliza para todo. Hace bastante frío. En la meteo hablan de la llegada de bajada de temperatura en toda la península, excepto en la costa mediterránea, lo cual me alegra: no estoy convencido de la capacidad de aislamiento en mi vehículo. Desayuno en un bar cercano, y por primera vez cojo la bici. No es que el centro, esté lejos, ni mucho menos, pero un poco de pedaleo me sentará bien bien.

 

Del Misteri de Elche conocía más bien poco, por no decir nada. Solamente que era una representación de carácter religioso y que como tal fue reconocida Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en 2001. Ese reconocimiento se dió en la primera Proclamación de la Unesco en esa categoría, por lo que el Misteri fue el primer representante español sobre patrimonio inmaterial, lo que da idea de su importancia y valor. Es cierto que en 1931 ya había sido declarado Monumento Nacional, pero ahora estamos hablando de un reconocimiento internacional.

 

El Misteri reúne elementos teatrales, musicales, religiosos, corales...sin olvidar los técnicos pues combina el plano horizontal (actuaciones en escena) con el vertical (relación entre tierra y cielo). Tiene lugar cada año, los días 14 y 15 de agosto en la Basilica de Santa María y viene a representar la muerte, entierro y subida al cielo de la Virgen María. La primera parte, el día 14, es conocida como la Vespre (la víspera), y cuenta como, ante el deseo expresado por María de reunirse cuanto antes con su hijo, un angel viene a anunciarle su próxima muerte, y cuando ésta ocurre se lleva su alma al cielo. El día 15 es la Festa propiamente dicha: el día del entierro y de la resurección de María en el cielo. Sirvan estas líneas como brevísima introducción al Misteri para todas aquellas personas que no lo conocían en absoluto. Extenderme más sería no solo pretencioso, sino torpe por mi parte, pues la tradición popular, el origen histórico, el simbolismo, las cuestiones técnicas o el trabajo preparativo de todos los miembros de la Casa del Misteri a lo largo de año, darían cada uno de ellos para un libro entero. Y yo apenas llegué a conocer unas mínimas nociones al respecto.

 

El hombre que me atendió en el Museo de la Festa, me cuenta que representaciones similares han tenido lugar en varios otros lugares de la Comunidad Valenciana y fuera de ella, pero que a diferencia del Misteri, que sí se ha perpetuado de manera interrumpida desde probablemente más de 500 años, esas otras han desaparecido. Y la razón es que a raíz del Concilio de Trento en el siglo XVI, quedaban prohibidas las representaciones de tipo teatral y figurativo en el interior de las iglesias. Los habitantes de Elche tienen el mérito de haber desafiado esa prohibición papal y de ese modo haber legado a la humanidad un patrimonio oral de grandísimo valor.

 

Solo me queda decir que me ha encantado conocer un poco más acerca del Misteri y dar las gracias a la Casa del Misteri y al Museo de la Festa por su colaboración y ayuda. En Elche, me queda por conocer el Palmeral, pero eso, mañana.

 


 

etapa 4 Elche – 20 enero 327 km

 

Patrimonio de la Humanidad: Palmeral de Elche

 

 

 

Es mi segundo día en Elche y, afortunadamente, puedo trabajar con otro patrimonio sin tener que desplazarme. No es que mover el auto sea muy trabajoso, pero sí es cierto que me aún me causa un poco de aprensión, particularmente, después de los pequeños percances que tuve anteriormente.

 

Desayuno en el mismo bar, donde de nuevo me permiten cargar el móvil. Sobre esta cuestión, tengo que decir que la carga de las baterías (la del móvil, la del portátil, y las del dron) es una de las pequeñas tensiones que supone para mí este viaje. Eso es algo de lo que, estando en casa, nunca había supuesto para mi el más mínimo problema. Basta con enchufar el móvil, a cualquier momento del día, y punto. Y si hay que recargarlo más de una vez, se vuelve a poner. Pero en viaje, y con tantas bateriás que vigilar, todo cambia. Y menos más que tengo un móvil con carga rápida: en menos de una hora está listo. Las baterías del dron en cambio requieren al menos un par de horas. Por ello, este segundo día, cuando hube terminado las grabaciones que tenía que hacer, me fui a la biblioteca de la universidad de Elche, y allí pude trabajar y ponerme al día de todo.

 

En cuanto al Palmeral de Elche, el segundo patrimonio de la ciudad con reconocimiento de la Unesco, ¿qué puedo decir que no resulte aburrido para cualquier habitante de Almería y más aún de Roquetas de Mar? ¿hablarle de palmeras a un almeriense es como hablarle de arena a un tuareg: tiene más que contarte que tú a él. Así que de lo que se trata aquí es de comprender cual es la particularidad de este palmeral. Para empezar, es el más grande de Europa y el segundo más grande del mundo. Lo siguiente es que no se trata de palmeras, colocadas ad hoc, para adornar una avenida o una rotonda, sino que se trata de una herencia de varios siglos, si no miles de años, y que, entre otras cosas, se cuenta que el rey Jaime I, al reconquistar la ciudad de Elche a los musulmanes, quiso conservar esas plantaciones y emitió un edicto a tal fin.

 

Más que las palmeras en sí, lo que trajeron los árabes a la península – ya que en época íbera ya se tiene noticia que hubiera palmeras en la zona – es el sistema de cultivo de la planta en sí y, más particularmente, el sistema de regadíos y de acequias que implantaron para ello. De la palmera extraían los dátiles y usaban las hojas. De hecho, aún hoy, como se puede ver en el video que publicamos en Instagram (@rutadelpatrimonio), sigue trabajándose la palmera blanca para creaciones artesanales de diferentes tipos.

 

Finalmente, es de destacar que el Palmeral no es un único espacio, sino la suma de varios huertos que se conservan en el interior mismo del casco urbano (huerto del Cura, Huerto del Chocolatero, Parque municipal, etc) cubriendo una superficie aproximada de 2 km² con una cantidad total de aproximadamente 200 000 palmeras.

 

Estos diferentes elementos son los que hacen del Palmeral un espacio tan valioso para hacerle merecedor del reconocimiento de Patrimonio de la Humanidad.

 


 

etapa 5 Valencia – 23 enero - 525 km recorridos

 

Patrimonio de la Humanidad: la Lonja de la Seda

 

 

 

Esta etapa, ya de por sí bastante larga, con 172 kilometros entre Elche y Valencia, se ve alargada aún más por extraviarme en algún punto de bifurcación cerca de Gandía. No suelo ser demasiado despistado conduciendo, pero como vengo diciendo desde el principio, el aprendizaje en el manejo de un vehículo más largo y más ancho de lo que es un coche normal, conlleva más tensión de lo habitual. Por poner un ejemplo, a diferencia de un coche corriente, este vehículo ocupa casi todo el ancho de un carril de un autovía lo que obliga a estar mucho más pendiente de no salirse de la vía. En consecuencia, voy mirando por el retrovisor – o mejor dicho por los dos retrovisores: izquierda y derecha - con mucha más frecuencia de lo que suelo hacer. Para los que suelen conducir camiones o autobuses esto no supone ninguna dificultad, pero ese no es mi caso. Soy un novato absoluto. De hecho ahora valoro mucho más la destreza de los profesionales que manejan vehículos de gran tonelaje, y en cuanto a los autobuses articulados que se mueven en ciudad o los camiones con remolque, ya mejor no hablamos. Vaya por ellos mi admiración. También uso mucho más Google Maps, especialmente en las entradas y salidas de las ciudades, sobre en las grandes ciudades. Y Valencia lo es.

 

Esta etapa es especial porque voy a recoger al aeropuerto a una amiga que ve va a acompañar durante un par de semanas. Como no me hace ninguna gracia entrar en el aeropuerto rodando, decido aparcar en Quart de Poblet, un pueblo de la aglomeración de Valencia. (en otra crónica hablaré del proceso de búsqueda de la zona de aparcamiento; todo un dilema). En este caso el aparcamiento que escojo está situado cerca de una estación de metro así que en principio es un lugar perfecto. Solo que al llegar allí, resulta que ya no existe este aparcamiento, por lo que doy unas cuantas vueltas por la zona y me decido por aparcar en la calle, en fila...porque compruebo que esas plazas son más anchas de lo normal, ¡todo es importante!

 

El primer día doy una vuelta por el centro de Valencia, que no conocía, y me parece una ciudad muy interesante, con muchos edificios con arquitectura imponentes como el propio ayuntamiento, el edificio de Correos o la misma estación de ferrocarril. Todo el casco histórico tiene mucho atractivo y es un placer pasear por las calles. El día siguiente visitamos la Lonja de la Seda, que es el motivo de mi visita. Su arquitectura es definida como “gótico civil valenciano” y eso merece un comentario. Efectivamente, lo que llama la atención es que, por una vez, hablando de arquitectura gótica no hablamos de una construcción religiosa. No es una basílica, ni una iglesia, ni una catedral, ni tampoco un palacio real ni un castillo. Nada de eso. Estamos frente a un edificio cuya construcción fue promovida por la sociedad civil y con fines mercantiles. Solamente por eso ya merece el desvío. Por otra parte, esa función civil sin duda también ha influido en su reconocimiento como Patrimonio Mundial por la Unesco ya que no es algo muy corriente.

 

No voy a entrar en ninguna descripción técnica, ya que no tengo conocimientos al respecto, solamente quiero resaltar la belleza de la Sala de Contratación con su espectaculares columnas en forma de espiral , y el magnífico techo de madera esculpida de la sala del Consulado del Mar.

 

La mención a la seda nos retrotrae a los orígenes del siglo de oro de la burguesía valenciana, relacionada muy especialmente con la industria téxtil, y también – aunque este dato lo he visto mencionado en muy raras ocasiones, por lo que no estoy seguro de su veracidad- con el comercio de la Ruta de la Seda, que desde la edad media conectaba a Oriente con Occidente.

 

Por último, en la misma web de la Lonja se destacan dos hechos curiosos, que reproduzco aquí: uno, que la primer letra de cambio (documento fundamental en el desarrollo de la actividad mercantil y bancaria) de España se originó en la Lonja y se conserva en el Archivo Municipal de Valencia; y dos, la mención de que los pisos altos del Torreón de la Lonja “se destinaban a cárcel de mercaderes morosos en el pago. Negocios y prisión: todo en el mismo lugar.

 

Valencia cuenta con dos otros patrimonios de la Humanidad: el Tribunal de las Aguas y las Fallas, como patrimonios inmateriales, que decido descartar de la ruta, en el primer caso porque va vinculado al Consejo de los Hombre Buenos de Murcia, del que ya he hablado, y en el segundo caso, porque considero que son sobradamente conocidas. La ruta es larga y no me queda más remedio que descartar algunos patrimonios. La siguiente etapa será la Tarragona Romana. Más en @rutadelpatrimonio

 


 

etapa 6 Delta del Ebro 25 enero - 719 km recorridos

 

Reserva de la Biosfera: Delta del Ebro

 

 

 

Desde Valencia hasta el Delta del Ebro son unos 200 kilometros. Una etapa bastante larga pero que haré integramente por autovía, que siempre se va más cómodo. Por el camino, nos paramos a repostar y en el área de servicio, muchos puestos de venta de productos locales. Compramos 5 kilos de naranja de Valencia por eso de llevar algo de la zona.

 

Al acercarnos al Delta cogemos una carretera provincial y a parte de un pequeño error de orientación que nos desvía unos pocos kilimetros, ningún otro inconveniente que señalar. En la zona pasamos dos noches. La primera en San Carles de la Rápita, que se encuentra justo al comienzo del Delta y la segunda más adentro en Deltebre. Lo que uno se encuentra en cuanto a áreas de aparcamiento varía mucho entre un lugar y otro. En San Carles una zona gratuita, cerca del pueblo, tranquila y con servicio de agua. En Deltebre, en cambio, el área de autocaravanas es de pago, está bastante alejada del pueblo – que por cierto no tiene nada, o poco, de interés para visitar- y por si fuera poco, cobran por partida doble: por aparcar y por el servicio de agua. Un desastre.

 

El Delta en esta época del año cuenta con muy pocos visitantes, lo cual es de agradecer. El tiempo es excelente. Las numerosas marismas y charcas con colonias de flamencos son un motivo de disfruta en la ruta que realizamos en bici. Las vistas en la punta del Delta son espectaculares y la sensación de encontrarse en un lugar sin contaminación no hace sino contribuir a la experiencia de libertad y de relajación. Aunque hay un poco de viento, no es lo suficiente fuerte como para impedir volar el dron. Las condiciones son excelentes y tomo unos cuantos videos, siempre con precaución pues no domino aún el aparato. Luego tendré que descartar el 80% del material por maniobras y movimientos inútiles, pero el resto servirá para montar un post en Instagram interesante.

 

Nos encontramos de repente con una extraña red de grandes dimensiones de unos 3 metros de altura por 5 de largo, fijada en mitad de la playa, que no acertamos a comprender la función. No es una red de protección, ni de prohibición de acceso ni para practicar volleyball, ni cualquier otro deporte. Tampoco hay ninguna señal de información. Estoy intrigado y como veo una furgoneta a proximidad, me acerco por si acaso. La puerta trasera esta abierta y parece que alguien está sentado en el interior.

 

-“Buenos días, ¿sabrían decirme para que sirve esta red?”. Desde dentro de la furgo aparecen otras dos personas, con una sonrisa dibujado en los labios.

 

-“Claro, la pusimos nosotros.”

 

-“¿Y eso? ¿para qué?”

 

- “Es una red de aterrizaje de dron”

 

-???

 

Resulta que trabajaban para Medio Ambiente y estaban tomando también imágenes para trabajos de conservación y difusión de la flora. En vez de aterrizar el dron, que me dijeron era bastante pesado, simplemente lo dirigían contra la red donde se quedaba enredado y así lo recuperaban más facilmente. Me enseñaron el dron. O mejor dicho los drones, ya que tenían dos. Más bien parecían unos pequeños aviones de casi un metro de largo. Nos despedimos de ellos y seguimos la ruta disfrutando del Delta. Hicimos una parada en la lonja del puerto pesquero de San Carles para ver el proceso de subastas. Como corresponde al producto, muy perecedero, la subasta debe ser rápida y eficaz. Y así es. En menos de media hora, descargan el pescado, lo separan por productos, lo colocan en diferentes bandejas. Cada bandeja va a una cinta rodante donde pasa por un detector y recibe una etiqueta con el tipo de producto y la ficha del barco. Luego pasa por la zona de subasta donde una cámara capta el detalle y los compradores, situados en unas gradas, ven la mercancía en una gran pantalla. La venta empieza a un determinado precio y va bajando rápidamente centimo a centimo. El primero que pulsa se hace con la compra. Menos de media hora entre la descarga del barco y la adjudicación.

 

 


 

etapa 7 Tarragona 27 enero - 801 km recorridos

 

Patrimonio Humanidad : Tarragona Romana

 

 

 

En Tarragona, como en todas las ciudades de cierto tamaño, el acceso y búsqueda de zona para estacionar se vuelve más dificil. O bien nos quedamos fuera y entonces llegar al centro es una odisea, o nos adentramos en la ciudad, donde a la dificultad de aparcamiento se suma el riesgo de circulación por calles estrechas. Optamos, por lo segundo y fue un visto y no visto. Llegar al final de una avenida y media vuelta hacia una zona intermedia donde nos quedamos en una área que parece bastante tranquila. Nos quedamos ahí dos días. Gracias a las bicis que transporto, la distancia no resulta problemática. Son unos 10 minutos para llegar al centro.

 

La ciudad bien merece el reconocimiento de la Unesco. Está salpicada de numerosos restos arqueológicos de la época romana casi en cada intersección de calles. Empiezo a tomar imágenes pero pronto me doy cuenta que durante la edición, seré incapaz de recordar a qué correspondían con exactitud. Bueno, tampoco importa demasiado: esté no es un proyecto para comentarios exhaustivos y académicos, sino un simple acercamiento al patrimonio.

 

Por otra parte ya voy comprobando que la obtención de autorizaciones para acceder a los lugares y para grabaciones aéreas con dron es un verdadero via crucis. En primer lugar se debe identificar cual es el organismo encargado del patrimonio, luego descubrir quien, en ese organismo, es el responsable de otorgar o denegar los permisos, y finalmente, el propio proceso de solicitud exige casi siempre rellenar solicitudes, hacerlo con antelación suficiente, y luego esperar la respuesta. Recuerdo que en Teruel, donde al final descarté ir por razones metereológicas, me pedían poco menos que un dossier informativo! Obviamente todo esto casa poco o nada con un viaje con etapas cortas, realizado por una sola persona y sujeto a cambios de ruta y de fechas. Así que ya me voy dando cuenta que lo mejor es presentar mis demandas cuando llego a cada lugar. Y en cuanto a las imágenes aéreas con dron… contestaremos a la gallega: ni si ni no, y quizás lo contrario. Todo lo que concierne el uso de dron despierta recelos en las autoridades tanto por cuestiones de normativa compleja como por ausencia de normativa. En una etapa anterior, que no nombraré, pido permiso a un policía que se encontraba en las inmediaciones. Este consulta por teléfono con un superior, y oigo como éste menciona el Ministerio de Interior, habla de rellenar formularios on line y de competencias municipales… Para ponerse a temblar! En verdad, ya sabía yo lo del registro en la web del ministerio, pero tambien recuerdo que para una simple consulta al ayuntamiento para una cuestion totalmente diferente, necesitaba acceder con el perfil de usuario de @Clave y que el sistema estaba bloqueado, y que debía reiniciar la contraseña y que el formulario no permitía introducir los datos que ahí se exigían, et. Conclusión: pasé de todo eso y así, ahora cruzo los dedos cada vez que saco el dron y empieza a volar.

 

En Tarragona, no fui capaz -o no tuve tiempo- de obtener permisos de acceso a los monumentos romanos, por lo que entré donde me dejaron y para el resto: imagenes de calle. Comimos dos veces en un bonito restaurante sudamericano, compramos un cargador para coche, dimos un paseo por la playa y pasamos dos días agradables. Siguiente etapa: el Monasterio de Poblet

 

Poblet -  29 enero

 

Puesto que escribo este artículo con un mes y medio de retraso, (pues sí, me cansé de visitar, fotografiar, pedir permisos y escribir y esto último lo sacrifiqué hasta hoy que lo retomo) los recuerdos y las fechas se van esfumando un poco  y no me queda más que breves imágenes y momentos, que serán lo que voy a trasladar ahora.

Así pues, saliendo del Tarragona, nos dirigimos a Poblet a ver el Monasterio, patrimonio de la humanidad. Al tratarse de un edificio religioso aún habitado, la persona al mando, o sea la que daba los permisos de acceso y otros, era el Pior. Nos costó lo suyo hablar con él. Por mediación del encargado de la oficina de visitantes y luego del "monje de la Puerta" (así creo recordar que se referían a él), pudimos hablar con él por teléfono, después de una buena hora, que aprovechamos para desayunar. Le explicamos el proyecto y nos concedió permiso de entrada y para tomar fotos del recinto. Todo ok. Pero cuando mencionamos el tema del dron, su actitud cambió totalmente, avisándonos que de ninguna manera se permitían que sobrevolara el monasterio ningún dron y que si fuera necesario avisaría a la policía. Para tranquilizarlo le digo que lo entiendo perfectamente y que por supuesto me abstendría. Al final lo que hicimos fue hacer la visita del interior y luego tomar imágenes aéreas desde fuera del recinto, teniendo mucho cuidado que en vertical no entrara el aparato en el espacio privado y haciendo uso del potente zoom del Mini2 para conseguir unas imagenes minimamente respetables.  La visita en sí fue muy instructiva, pues el monasterio está estrechamente relacionado con la historia de Cataluña. Ahí fueron enterrados varios miembros de la Corona de Aragón durante el siglo XIV y XV. Ahí es nada. También están los sepulcros de varios antiguos abades.

Me llamó la atención que por todas partes se veía la famos cruz de los templarios. Como precisamente había empezado a leer el libro de Demurger sobre la historia del Templo, quise saber un poco más y al salir le pregunté por ello al "Monje Guardian de la puerta". Se le iluminaron los ojos y siguió una especie de discurso de sí pero no, de tal vez y quizás y sobre todo su lucha interior entre el deseo de hablar y el deber de no hacerlo. Ese fue el momento más interesante de la visita porque resulta que era precisamente un gran estudioso de la historia de la Orden del Temple. "Conocí en persona al número 3 de los 27 escalafones de la jerarquía" me dice. "Pero sigue existiendo esa orden?" le pregunto. Con rodeos me da a entender que efectivamente así es, pero con otra denominación, claro está.

La cuestión de los templarios es un poco como la de la construcción de las pirámides o de los calendarios maya. Es una de esas cuestiones que al haber dejado muchos interrogantes en su momento, a día de hoy da pie a infinidad de teorías, especulaciones, ensayos, ideas de todo tipo. Resumiendo, el monasterio de Poblet parece haber estado relacionado con dicha Congregación, lo cual no es nada sorprendente, pues el Temple tenía sedes y membresías por toda Europa. Las hubo muy particularmente en España, debido a que, siendo los templarios basicamente militares bajo autoridad del papado para defender la religión católica y los lugares santos, frente a los herejes y los paganos, y habiendo tenido un papel más que protagonista en las Cruzadas, no podían menos que estar muy activos en la España de la reconquista.


Vilafranca, 30 de enero...aproximadamente

 

Como explican en la página del municipio, se debe decir Vilafranca a secas, y no Vilafranca del Penedés. Ese es su nombre. Pues vale.

La estancia en Vilafranca, y esta etapa misma, fueron un poco por casualidad. Veníamos del Monasterio de Poblet buscando un lugar para pernoctar (recordemos que esa es cuestión primordial cuando se viaja en autocaravana) y buscando en internet, parecía esta una buena plaza, con servicios de agua y espacio suficiente reservado. Efectivamente así fue. Un lugar especial puesto a disposición por el municipio, por lo cual estamos muy agradecidos, los camperistas de paso.

Es cierto que los Castells figuraban en mi agenda, como patrimonio inmateriales de la humanidad. Sin embargo, al no encontrar ningún lugar apropiado cerca de Valls, ni haber recibido respuesta a mis requerimientos por email, y con prisas por avanzar y llegar a Girona donde debía coger el avión mi amiga,  había más o menos desistido de ese elemento.

Primera buena sorpresa: un espacio acogedor (ya lo he dicho).

Segunda buena sorpresa: una lavandería cercana (hacer la colada es otra de las preocupaciones de los camperistas. No en vano, en las apps de campers, suele haber un marcador, para ello, junto con el marcador de vertido y relleno de aguas)

Tercera buena sopresa: a parte el hecho de que la ciudad era muy agradable para recorrer el anochecer, con bonitas calles y edificios históricos, de repente me encuentro con un local con grandes fotos de Castells. Había tomado antes buena nota de una estatua dedicada als Castellers, pero como también las había  visto en Tarragona, no le presté especial atención. ¡Error! Resulta de era la sede de la agrupación local de Castellers y de repente me volvió a la mente el sentido común y el recuerdo. Bon Sang! Bien sûr! ¿Como se me podía haber olvidado?? La tríada que conocía bien por mis años de residencia en Cataluña... Los Castells de Valls, los de Terrassa... y los de Vilafranca. Espero que me perdonen por ello, más aún al saber que la agrupación de Vilafranca había sido la primera en la historia - como muy amablemente me explicó la chica que nos atendió en el local, que era miembro de la colla y cuya hija también participaba en esa actividad - la primera, dijo en levantar un PILAR de NOU. O sea una torre humana de 9 personas subidas unas encima de los hombres de otras- Record del Mundo por decirlo en lenguaje deportivo. Había ocurrido en noviembre, hacía apenas 2 meses. Siguieron explicaciones, anécdotas y proyectos de futuro para la "colla" contados por una protagonista directa. Muchas gracias amiga y buena suerte. Ahí quedó milagrosamente realizada (será la influencia del reciente Poblet...) la etapa sobre los Castells 


Barcelona 31enero / 1 febrero

 

Brevemente, el lugar escogido para pernoctar fue en Gavá, a unos 8 km de Barcelona - es zona de bajas emisiones - a 20 metros de la playa. Permanecimos alli dos noches. Lo más importante de esta etapa - lo siento pero es así- no fueron las obras de Gaudí, que son únicas en el mundo y PAtrimonio de la humanidad - sino que he podido ver a mi familia. A mi madre y a mi hermana. He pasado el día con mi madre.

El día siguiente, con mi amiga visitamos las obras de Gaudi. Elle el día anterior visitó el Parque Guell, así que fuimos a la Sagrada Familia - tomas aéreas - , a la Casa Batlló - tomas de calle - y a la Casa Milá, o la Pedrera, como es conocida, donde si obtuvimos permiso para entrar y grabar.

(Con esto de los permisos tengo que hacer un pequeño apartado, por si aún no lo he dicho. No recibo por este proyecto ninguna ayuda de ninguna institución pública ni privada. Ni siquiera una simple carta de recomendación por parte de la Unesco-España que me habría facilitado mucho la tarea y no les hubiera costado absolutamente nada. Sospecho que detrás hay oscuras razones de corporativismo y de celo, del estilo de "nosotros somos los únicos que nos ocupamos de la difusión del Patrimonio Cultural, que por algo somos los inventores de la expresión Patrimonio de la Humanidad. Sospecho que es eso, porque si no, su actitud cerrada entraría en flagrante contradicción con los nobles principios y objetivos que habitualmente comunican sobre que el Patrimonio Cultural es asunto de Todos y pertenece a Todos). Así pues sin ninguna ayuda financiera y con los gastos que conlleva este proyecto, me veo en la necesidad de solicitar en cada lugar y para cada Patrimonio, un acceso especial, tipo periodista. A veces lo consigo, otras no. Así que gracias a la dirección de Casa Milá.

Visitada la familia y las obras Gaudí, volvemos a Gavá-playa, lugar idílico en ese periodo del año para descansar y salir al día siguiente hacia Girona


Girona 2 / 4 de febrero